(Brad Pitt, Ed Sheeran y McDonald’s al servicio de una estrategia que no deja nada al azar)
Hay campañas que se ven…
Y campañas que se sienten.
La película de Fórmula 1 pertenece a este segundo grupo.
No se limita a promocionar una película: construye una atmósfera. Una experiencia que te atrapa antes de que la película siquiera saliera.
1. Brad Pitt como símbolo emocional (no sólo famoso)
Elegir a Brad Pitt no es casualidad.
Sí, es una super estrella. Pero lo que representa es lo que realmente importa: madurez, estilo, carisma.
No es solo una cara conocida en un cartel.
Es un mensaje visual: este no será cualquier drama de carreras. Será algo con peso, con estilo, con intención.
🧠 Lección para marcas:
Elige rostros que representan emociones, no solo números de seguidores.
No es fama: es coherencia emocional.
2. McDonald’s y los autitos que mueven la nostalgia
¿Un combo con autitos de la F1?
Sí, y fue un golpe maestro.
No son simples juguetes.. Son anclas emocionales. Disparan recuerdos de la infancia, colecciones, pistas armadas en la sala.
Son contenidos virales disfrazados de regalo.
Y lo lograron: los autitos circularon por redes, canales de review, y páginas de coleccionistas.
Una campaña unida que funcionó (Y muy bien)
🧠 Lección para marcas:
Lo pequeño puede ser memorable. Lo emocionalmente significativo supera al presupuesto publicitario.
📌 Dato: La colaboración de McDonald’s se activó semanas antes del lanzamiento del tráiler oficial, reforzando la expectativa sin revelar nada. Fuente: The Drum.
3. Ed Sheeran como ancla emocional anticipada
Cuando anunciaron que Ed Sheeran estaría a cargo de parte de la banda sonora, se encendieron dos cosas:
- Curiosidad.
- Conexión emocional.
Ed no es solo una voz conocida. Es una marca en sí misma. Y su estilo relajado, íntimo y humano suaviza el ritmo frenético de la F1.
Es como si te dijeran: «Sí, habrá acción… pero también alma.»
🧠 Lección para marcas:
La música puede preparar el terreno emocional antes de cualquier anuncio. No subestimes su poder.
📌 Dato: Ed Sheeran ha sido parte de más de 12 soundtracks de películas en la última década. Fuente: IMDb.
4. Una historia contada desde todos los ángulos
Brad Pitt representa.
Sheeran conecta.
McDonald’s viraliza.
Y todo con el mismo objetivo: crear una experiencia.
No son piezas sueltas. Son partes de una narrativa que se mueve como un equipo bien orquestado.
Cada una empuja desde su espacio, pero todas apuntan al mismo mensaje: «Esto no es solo una película. Es algo de lo que quieres formar parte.»
🧠 Lección para marcas:
Las buenas campañas no gritan por separado. Susurran juntas, a un mismo objetivo: No salir de tu mente
5. La campaña no vende: invita a pertenecer
Lo mejor de esta campaña no es su escala, sino su intención.
No necesitas ser fan de la F1, ni de Brad Pitt, ni de Ed Sheeran… Solo necesitas sentirte parte de algo.
Y eso es lo que logra esta campaña:
Una invitación implícita.
Un mensaje emocional que no se impone, pero.. se queda.
🧠 Lección para marcas:
Promocionar es fácil. Construir pertenencia es otro Level.
[ Pon ojo ]
Mientras otras compañías usan su gran presupuesto para crear contenido vacío… estos lo usaron para crear contenido memorable, que de ganas de ir a ver la peli, así no te gusten las carreras
No grita. No fuerza. te habla despacito, con intención.
Y eso deja huella.. Si tu marca logra eso, no necesitarás perseguir a los clientes. Ellos llegarán solitos